La mañana ha resultado absolutamente maravillosa. Me ha escrito varias veces y he contestado con mensajes más o menos graciosos, luego nos hemos contado algunos gustos de la infancia (me ha hablado de Mafalda y Asterix), con lo que la conversación ha fluido entre lo profesional y lo distendido.
Ahora lo que quisiera es poder estar a su lado y reirnos una rato juntos del mundo, lo divino y lo humano.
Seguiré desgranando los segundos hasta que toque pedirle que volvamos a comer juntos.
miércoles, 27 de febrero de 2008
Ahora quiero más
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2 comentarios:
Oh! la emoción del corazón. Otra vez acecha la primavera.
Pues a ver si se acaba la primavera, que ya dura varios años.
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