jueves, 27 de marzo de 2008

Contradicciones

Esta mañana al menos ha esbozado un protocolario buenos días mientras bebía un vaso de algún anticatarral.

Ha surgido una ocasión de un contacto meramente profesional y he comprobado que está resfriada, además de seria. Sea como sea sé que ella intenta que la relación profesional no se vea afectada por cosas externas.

Al estar cerca de ella me asaltan todos los demonios, por un lado he vivido unos días tranquilos, sin tener la mente a dos mil buscando excusas para acercarme, por otro veo que estoy demasiado acostumbrado a tener dependencia psicológica de mi propia necesidad de buscarla. Sin embargo cuando pienso en ella empiezo a sentir cierta angustia, pues he empleado demasiado esfuerzo en una misión imposible...

Sea como sea la relación profesional debe continuar hasta que me marche, y tanto si quisiera volver al ataque como si no lo más conveniente por ahora es no dar ni un solo signo de pretender algo más allá de lo estrictamente laboral.

No hay comentarios: